El afecto y sus efectos en tu cuerpo

El estado afectivo tiene efectos en el estado de ánimo, en el cuerpo y en la gente que te rodea.

La ansiedad y el estrés pueden provocar reacciones:

– físicas,

– emocionales y

– posibles conflictos en las relaciones interpersonales.

De igual manera las emociones agradables como la alegría, tienen consecuencias a nivel físico como:

– mayor energía,

– eleva el umbral de tolerancia al dolor e

– incrementa el ritmo cardíaco.

Al mismo tiempo, disminuye la contracción de un serie de músculos, reduciendo la tensión y el estrés. Socialmente, genera relaciones interpersonales más satisfactorias y saludables. Demuéstrate afecto.

Todas las emociones nos afectan de manera positiva o negativa generando efectos en nuestra vida. Cuidar tus emociones, es también cuidar tu cuerpo.

Te invitamos a platicar con nuestros médicos PrevenISSSTE en tu Clínica de Medicina Familiar para que te puedan orientar y buscar apoyo psicológico si lo necesitas.

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¡Vive más, vive bien!

Descubre si eres una persona con depresión

La depresión es una enfermedad que se presenta cada vez con mayor frecuencia, sin embargo, muchas personas suelen confundirla con la tristeza, un estado de ánimo que es pasajero.

Si te has sentido triste la mayor parte del tiempo, durante al menos dos semanas, puedes estar cerca de la depresión. Adicionalmente algunas señales de deben ser tomadas en cuenta son:

– la falta o aumento en el apetito,

– alteraciones en el sueño,

– aislamiento social,

– dificultad para concentrarte, poner atención, recordar cosas e

– incapacidad para disfrutar de aquello que antes disfrutabas.

Si sospechas que estás deprimido, no lo dejes pasar. Infórmate sobre esta enfermedad y acércate a tu médico o a un psicólogo para ser valorado y que pueda orientarte. La depresión como otras enfermedades, tiene un mejor pronóstico si se atiende a tiempo.

En PrevenISSSTE cerca de ti, queremos que goces de una buena salud tanto física como psicológica y emocional, ya que si nos encontramos mal en alguna de las áreas no podemos lograr un bienestar integral.
Si conoces a alguien que le pueda servir este artículo, compártelo.
Quiérete más, todavía hay mucho por hacer. ¡Vive más, vive bien!

Controla tu estrés.

Si quieres reducir tu nivel de estrés, evita darle vueltas y vueltas a los problemas, mejor resuélvelos. Toma lápiz, papel y manos a la obra con estos cinco pasos:

1. Describe el problema de forma concreta.
2. Busca posibles soluciones.
3. Compara consecuencias positivas y negativas de cada solución.
4. Decide cuál es la solución más adecuada.
5. Actúa y mantén una actitud positiva.

No acumules preocupaciones ni pospongas decisiones. En PrevenISSSTE deseamos apoyarte con estrategias para la resolución de conflictos y para el mejor manejo de situaciones etresantes. Visita a tu médico PrevenISSSTE quien podrá orientarte.

Cuando se acerca el fin de año acecha la depresión estacional.

Las fiestas de Navidad y fin de año no siempre son sinónimo de alegría y encuentros familiares. Frustración, soledad y tristeza son sentimientos que experimentan muchas personas en esta época. Factores como desear tener la figura de alguien más, el amor, la publicidad y aspectos climatológicos y biológicos, influyen para que el ánimo y la conducta de las personas en estas fechas sea inestable.

Las metas personales no alcanzadas se hacen más presentes en fechas que tienen relevancia para la persona, como cumpleaños, aniversarios o celebraciones especiales. En las fiestas navideñas los cambios de estado de ánimo se acentúan porque el periodo de vacaciones es más largo, las fiestas son colectivas, las referencias a la Navidad están por todas partes y reflexionamos los resultados alcanzados.

Se espera mucho de las fiestas y la convivencia con los seres queridos, sin embargo, a pesar de ser el cierre de año sentimos que no alcanzamos el ideal de felicidad que esperábamos y entonces viene la desilusión y la tristeza.

Para enfrentar estos sentimientos algunos especialistas recomiendan:

• Identificar los miedos: Tratar de encontrar a qué se le teme y evaluar si esas preocupaciones tienen fundamento.

• Hacer listas de agradecimientos: Una enumeración de las cosas positivas que se tienen, como la buena salud, la compañía de la familia, la posibilidad de trabajar, las amistades, etc.

• Cambiar de ambiente: Los recuerdos, ya sean malos o “dolorosamente buenos”, pueden hacerse un poco más livianos si no se permanece en el mismo lugar donde se produjeron; un paseo o un viaje corto reduce la ansiedad en algunos individuos.

• Ayudar a otros: La sensación de hacer algo útil por personas menos afortunadas contribuye a elevar la autoestima y a reconciliarse con las actividades de la fecha.

• No beber en exceso: El olvido que proporciona el alcohol es sólo temporal y no contribuye a resolver el problema.

• Procurar espacios iluminados: Algunos estudios han demostrado que los ambientes bien iluminados ayudan a combatir la depresión y que vestirse con colores llamativos demuestra vitalidad.

• Convive con tus amigos: Únete a la fiesta. Interactuar con otros, hará que tu ánimo mejore.

Si en este fin de año empiezas a sentirte triste, pon en práctica las recomendaciones anteriores y recuerda que en PrevenISSSTE cuentas con apoyo.

¡Vive más, Vive bien!

Depresión, ¿Sabías qué… ?

De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud la depresión es generada por factores biológicos, psicológicos y ambientales.

La Secretaría de Salud refiere que entre el 12 y el 20% de la población de 18 a 65 años de edad (más de 10 millones de personas) padece o padecerá depresión en algún momento de su vida.

Los siguientes condiciones aumentan el riesgo de padecer depresión:

–      ser mujer,

–      tener entre 20 y 40 años,

–      haber vivido separación o divorcio,

–      contar con poco apoyo social,

–      contar con antecedente de familiares que hayan padecido depresión,

–      pérdida de uno de los padres u otra experiencia traumática a edad temprana y exposición a eventos estresantes a cualquier edad.

Si presentas alguno de estos antecedentes, busca apoyo, acude a tu Clínica de Medicina Familiar con el Médico PrevenISSSTE, te podrán orientar y resolver tus dudas.

Afrontando el estrés día a día

 

“Hoy desperté y pensé en lo mucho que me duelen los hombros, ¿Cómo es posible? Si apenas me voy a levantar y dormí más de 8 horas, debería estar muy descansado”. Esto puede pasar cuando tienes estrés.

 ¿Qué es el estrés?

Tensión provocada por situaciones agobiantes que originan reacciones que rompen con el equilibrio previo.

Sigue estas sencillas estrategias una vez al día durante 2 semanas y afronta tu estrés.

Relajación y respiración

• Disponer de un lugar tranquilo y sin ruido o distracciones.

• Tomar 10 minutos sin interrupciones y si se puede poner música instrumental relajante.

• Hacer unas 20 respiraciones profundas, llenar los pulmones, inflar el estómago y cerrar los ojos, antes de empezar a relajarse soltando lentamente el aire.

• Empezar a tensar y relajar las partes del cuerpo desde los dedos de los pies. El movimiento consiste en contraer al máximo por 10 segundos y luego relajar cada una de las siguientes partes del cuerpo, una sola a la vez se tensa 10 segundos y se descansa 10 segundos pasando a la siguiente en este orden: pantorrillas, piernas, nalgas, abdomen, manos, antebrazos brazos, hombros, cuello, dientes y ojos.

• Al finalizar, volver a hacer las respiraciones profundas y abrir los ojos. Es bastante sencillo y si lo haces una vez por día comenzarás a relajarte y tendrás más control sobre el estrés. Regálate 10 minutos, te lo mereces, la gente que convive contigo te lo agradecerá.

Sigue buscando alternativas para manejar el estrés, en PrevenISSSTE queremos estar cerca de ti.

¡Vive más, vive bien!

Cuando el estrés te maneja.

Estar estresados, es algo que todos hemos sentido en diferentes momentos pero tarde o temprano desaparece. Cuando el estrés se prolonga o rebasa nuestra capacidad para controlarlo, puede llevarnos a un estado de cansancio que nos consume y agota para realizar actividades.

Dolor de cabeza, insomnio, mal humor, dolores musculares y malestar estomacal, son algunas señales de un mal manejo del estrés, el cual puede llegar a afectar la salud y alterar nuestra vida diaria.

El estrés aparece en nosotros como consecuencia de vivir continuamente situaciones que consideramos difíciles de enfrentar. Por ejemplo, tener que realizar varias actividades en poco tiempo o tener problemas familiares.

Ante estas situaciones, a veces es difícil pensar claramente. Pero también es posible enfrentar el estrés, controlarlo y aprender de estas vivencias.

Si estás bajo estrés te sugerimos:

• Mantén siempre una actitud positiva: Ten presente que las dificultades son parte de la vida y todos los días enfrentamos problemas con mayor o menor dificultad. La diferencia está en si nos sentimos capaces o no de superarlos.
• Detente y reflexiona: Piensa cuál es la situación que te causa inquietud y determina cuáles son sus partes: quiénes están involucrados, si es que está en tus manos darle solución, cómo es que te afecta, etc.
• Crea alternativas: Plantea todas las posibles soluciones ante un problema y elige la que tenga los menores costos y los mayores beneficios.
• Establece jerarquías: Elabora una lista de tus actividades y ordénalas desde las de mayor hasta las de menor importancia y da prioridad a las primeras.
• Organiza tu tiempo: Administra el tiempo para realizar tus actividades e incluye al menos un periodo corto de descanso entre ellas.

No dejes que el estrés te maneje, busca cómo controlarlo. En PrevenISSSTE queremos apoyarte para que adquieras herramientas útiles que te ayuden a manejarlo.

Razones comunes por las cuales te puedes deprimir

Tanto en el mundo como en nuestro país, la depresión tiene una alta frecuencia de aparición entre la población, lo que se ha convertido en un grave problema de salud pública.

Esta enfermedad puede ser desencadenada por distintas razones y algunas personas tienen mayor predisposición a padecerla. Conoce algunos factores de riesgo:

• Predisposición genética: Si algún miembro de la familia fue diagnosticado con depresión, tendremos mayor riesgo de padecer la enfermedad, es decir, tenemos una predisposición biológica; sin embargo, no todas las personas con una historia familiar presentan depresión
• El género: Diversos estudios demuestran que las mujeres, en comparación con los hombres, presentan mayor probabilidad de tener depresión, principalmente causada por los cambios hormonales que tienen a lo largo de la vida (ciclos menstruales, embarazos, abortos, menopausia)
• La edad: Es a principios de la vida adulta donde se concentran los casos de depresión, por lo que este grupo de edad es más propenso a sufrir la enfermedad
• Personalidad. Los rasgos de personalidad neuróticos como irritabilidad, cambios repentinos del estado de ánimo, descontrol emocional y con mayores niveles de rigidez y obsesividad son más propensos a la depresión

Éstas serían causas individuales relacionadas con la depresión, pero también existen factores provenientes del medio donde nos desenvolvemos, que están altamente relacionados con la enfermedad, por ejemplo, un bajo nivel educativo, bajo nivel socioeconómico, situaciones altamente estresantes (muerte de una persona cercana, desempleo, rupturas amorosas, problemas económicos, divorcio, enfermedades crónicas).

Hoy en día el aumento de la depresión ha causado un alto índice de discapacidad social, lo que afecta las actividades cotidianas y la calidad de vida de las personas que la padecen, por lo que es importante acudir con un profesional de la salud en caso de sospechar que se tenga la enfermedad.

Te invitamos a registrarte en la página www.prevenissste.gob.mx, responder tu Evaluación de Riesgos en Salud e ingresar al foro de Ansiedad y depresión de nuestra comunidad para que puedas platicar con un experto.

Conoce los síntomas de la depresión

Estar deprimido es algo más que estar triste, llorar mucho o estar cansado. Si quieres conocer más a fondo sobre este tema, aquí te presentamos algunos síntomas de la depresión:

• El estado de ánimo disminuye. En muchas ocasiones los amigos o familiares son los que perciben esta situación de apatía o melancolía
• Una persona deprimida normalmente es callada, distante, seria, aislada, irritable y poco tolerante. Con mucha frecuencia se siente sola, también puede haber llanto al recordar cosas que le hayan pasado
• Se pierde el interés por situaciones o actividades que antes producían placer
• Nacen sentimientos de culpa por cosas o situaciones que hicieron o dejaron de hacer en el pasado
• Se genera una ideación suicida. Esto va desde no querer estar vivo, pedir que pase algo e incluso la planeación de su muerte
• Puede causar insomnio y otros trastornos del sueño. La forma más típica, es despertar y no poder volver a dormir
• Existe un exceso de sueño y al despertar una sensación de cansancio
• Disminuye la energía. Con mucha frecuencia se puede sentir fatiga, lo que impide realizar actividades que antes se realizaban sin problema
• Constantemente se pueden presentan síntomas como: dolor de cabeza, náuseas y malestares musculares
• Se dan alteraciones del apetito: comer en exceso o no comer nada. Por lo tanto, puede haber ganancia o pérdida de peso

¡Vive más, vive bien!

 

Mantente lejos de la depresión

La depresión, como hemos mencionado en publicaciones previas, es una enfermedad que afecta el estado de ánimo y la salud mental de las personas, además de limitarlas en diferentes áreas de su vida. Es causada por diversos factores como:

• Hereditario (la historia familiar de depresión aumenta la posibilidad de presentar la enfermedad)
• Factores bioquímicos (alteraciones en el funcionamiento de neurotransmisores)
• Situaciones estresantes (muerte de un familiar, trabajo, problemas personales)
• Estacionalidad (en invierno aumenta el número de casos)
• Personalidad (rigidez, melancolía)

En las siguientes publicaciones hablaremos de los principales datos a considerar para identificar la depresión, pero primero queremos compartir algunas medidas preventivas para evitar la aparición de este padecimiento.

1.- Mantener la mente ocupada: Invierte tu tiempo positivamente en actividades que pueden ayudarte a estimular tu mente, como:

• Lectura
• Escritura
• Resolver crucigramas

2.- Tener una vida social activa: Pasa tiempo con personas con quienes disfrutes de su compañía y planea actividades con ellas, tales como:

• Excursiones
• Hacer ejercicio
• Ir al museo

3.- Vive con actitud y pensamientos positivos: Crea y recuerda pensamientos positivos y elimina los negativos. Mantén una buena actitud y visualiza las cosas y eventos positivos que te han sucedido en la vida.

4.- Buscar una vida productiva: Establece metas realistas que puedas llevar a cabo a corto y largo plazo. Planea con anticipación las tareas que realizarás durante el día. Practica tus pasatiempos favoritos como: bailar o servir de voluntario en la comunidad.

5.- Realizar actividades físicas: El ejercicio físico te ayuda a mejorar el ánimo, la  autoestima y te permite descansar mejor. Te recomendamos realizar, al menos, 30 minutos de ejercicio al día.

Te recordamos que en el Centro de Atención Telefónica PrevenISSSTE cerca de ti hay psicólogas que pueden orientarte y resolver tus dudas en relación a este padecimiento. Llama al 01 800 2000 128 opción 2 y con gusto te atenderemos.

¡Vive más, vive bien!